Tenemos demasiadas exigencias en cuanto a nuestro tiempo y muchas veces, para que todo encaje, sacrificamos el sueño. Tener una buena calidad de sueño es fundamental para nuestro bienestar. En promedio, un adulto debe dormir entre 7 u 8 horas, los niños pequeños necesitan unas 10 horas de sueño, mientras que los adolescentes necesitan, al menos, 9 horas.

Dormir bien puede traer consigo algunos beneficios, por ejemplo: reduce la frecuencia de enfermedades, te mantiene en un peso saludable, disminuye el estrés y mejora el estado de ánimo, entre muchos otros. Tener una buena noche de sueño te ayudará a levantarte de mejor ánimo y con más energía para realizar tus actividades diarias.